Gran clausura de la Semana Teológico Pastoral: reflexiones clave para una pastoral urbana y un llamado a la autenticidad

El encuentro destacó la intervención del padre Heriberto Cabrera, sacerdote salesiano y secretario adjunto de la Conferencia Episcopal de Chile. Con una notable trayectoria académica, incluyendo un doctorado en Teología Práctica por la Université Laval en Quebec, Canadá, y un diploma de estudios especializados en catequesis y pastoral por la Université de Louvain Lumen Vitae en Bélgica, el padre Cabrera presentó "Pistas para una pastoral en la gran ciudad". En su ponencia, resaltó la necesidad de ser modestos y realistas, avanzando con humildad y reconociendo que no existe un manual perfecto para el trabajo urbano. Subrayó la importancia de ver más allá de las apariencias y centrarse en el corazón de la realidad urbana, sugiriendo que el contexto urbano puede ser un lugar para el encuentro con Dios y un espacio de misión.

El padre Cabrera invitó a reflexionar sobre nuestro modelo pastoral y el paradigma bajo el cual operamos. ¿Estamos viendo los signos de los tiempos o estamos en un tiempo de signos? Esta visión se refleja en las experiencias bíblicas del resucitado, recordándonos la promesa de que “Él irá delante de ustedes a Galilea, allí lo verán” (Mateo 28:7). Si esta promesa sigue siendo actual para nosotros, significa que Dios nos precede en el contexto urbano. Nuestro desafío es reconocer y seguir a ese Jesús que nos precede en Santiago, nuestra Galilea moderna. El cambio de paradigma también implica comprender nuestra misión en una sociedad cada vez más pluralista. Esta diversidad no debe polarizarse, sino enriquecernos. La sociedad líquida, como describe Zygmunt Bauman, nos invita a ser flexibles y adaptativos en nuestra pastoral, reconociendo que la evangelización no es un proceso lineal, sino dinámico y contextual.

Sorprender y ser testigos del Evangelio

Monseñor Fernando Chomali G., arzobispo de Santiago, subrayó la importancia de sorprender y ser testigos vivos del Evangelio. Expresó su orgullo por el trabajo realizado y su preocupación por la falta de inspiración en las nuevas generaciones para seguir el camino sacerdotal. Compartió su experiencia personal de 33 años de sacerdocio y 18 de obispo, señalando que nunca ha llevado a un joven al seminario. Esta realidad lo interpela profundamente y lo llevó a reflexionar sobre la necesidad de repensar nuestra actitud y testimonio. La autenticidad, la fraternidad y la solidaridad son fundamentales. Debemos generar un ambiente de fraternidad y solidaridad, y tener una vida espiritual profunda. No somos proveedores de servicios; somos testigos de un encuentro personal con Jesucristo. La evangelización es un encuentro personal, no una estrategia de marketing. Debemos ser auténticos y crear proyectos comunes, buscar nuevos métodos y expresiones, y comunicar las buenas experiencias. En resumen, debemos repensar nuestra actitud, sorprender con nuestro testimonio, y fomentar la fraternidad y solidaridad en nuestra misión pastoral.

Además de estas reflexiones, la semana contó con la participación de tres panelistas: Catalina Bosch Carcuro, psicóloga cubana que ha vivido en Chile durante 32 años, habló sobre interculturalidad; María José Salas, una joven venezolana de 25 años, que llegó a Santiago de Chile hace 7 años, miembro del Regnum Christi y trabajadora en la Pastoral de la Universidad Finis Terrae, compartió su experiencia como evangelizadora digital con una profunda dedicación a la difusión de mensajes de fe y esperanza; y la hermana María Marcela Ponce, de la comunidad de hermanas misioneras de la Misión Gran Río, quien colabora con la Vicaría de la Misericordia, acompañando a adultos mayores, enfermos y médicos.

La Semana Teológico Pastoral 2024 cerró con un espíritu de reflexión, gratitud y un renovado compromiso con la misión pastoral en el contexto urbano, enfrentando los desafíos con humildad, confianza y creatividad.