Lunes 26 de febrero de 2018
La despedida del padre Juan Bagá: un sacerdote para los demás
Este lunes 26 de febrero, a las 13:00 horas, se realizaron las exequias del padre Juan Bagá en la parroquia Inmaculada Concepción de Vitacura. Una gran cruz de madera con la imagen de Jesús sobre su cuerpo recordó a los presentes lo que fue en vida y lo que significó Dios para él. En el templo, donde se desempeñaba como vicario parroquial, familiares, amigos, feligreses, sacerdotes obispos y el cardenal Ricardo Ezzati lo dieron su último adiós.
Fotos: Nibaldo Pérez
Periodista: Lorena Martino
[VIDEO] El testimonio del Padre Juan Bagá en "Sacerdote Hoy"
[TEXTO] Entrevista al Padre de la Parroquia Inmaculada Concepción
Llegó a Chile con 28 años de edad. Lo destinaron a nuestro país por cinco años que, sin embargo, se prolongaron por 60 años de servicio pastoral en la Iglesia de Santiago.
El padre Tomás Scherz, ex vicario para la educación y actual Vice Gran Canciller de la UC fue el encargado de la homilía. Su cercanía con el padre Juan le permitieron entregar palabras de cariño: "Juan, querido Juan, qué regalo fue tu presencia de casi 60 años entre nosotros. Dios, qué grande eres de no habernos separado del amor de Cristo, y de que tu testigo Juan, libertario, lisonjero y amable nos hablara siempre desde la experiencia de que Cristo es el Salvador".
Agregó: "Tú recordabas una verdad esencial: me he hecho sacerdote por los demás, no para mí, me debo a los otros y por eso me ofrecí a ir a misiones, donde fuera más necesario. He hiciste mucho más por nosotros, se sabe que por tu gestión se hizo difundir 250 mil nuevos testamentos y 45 mil biblias".
Concluyó agregando lo que más resaltaba de su personalidad: "Nunca condenaste y siempre fuiste generoso".
Palabras de reconocimiento
Su primera misión fue como asesor de la Juventud Obrera Católica (JOC), acompañando a los jóvenes en su revisión de vida. Quienes ahí lo conocieron aprovecharon de entregarle algunas palabras de despedida. El primero fue Iván Navarro quien trabajó con él en DUOC. Lo recordó como un hombre de fe, amigo y confidente: "Nos encontramos con un hombre extraordinario, que se hizo parte de nuestros ideales, que les dio carne, sustento y los hizo realidad. Trabajamos varios años y generamos el Departamento Universitario Obrero Campesino (DUOC) que hoy es la base fundacional de la institución y que después fue cobrando cuerpo y se hizo parte de la UC. El padre fue un motor y un compañero de ruta".
Jaime Caicedo, también parte del Departamento, agregó en su despedida: "el padre no fue sólo un sacerdote, sino también un consejero y un amigo".
A continuación, Ricardo Paredes, rector del Duoc UC, señaló: "Fue un cura inquieto, pero con una mente templada, de esas que no abundaban a finales de los 60'. Fue un comunicador de la palabra de Jesús a través de su ejemplo, especialmente en su participación en la Dirección de la Opinión Pública en el Arzobispado de Santiago, en la Radio Chilena, en Canal 13, en la UC y en la fundación del Duoc".
El amor de sus cercanos
Soledad Bernat Valcarcel, su sobrina, tomó luego la palabra diciendo a los asistentes: "No estén tristes, hoy debe ser un día de fiesta, Juan está en la Casa del Señor, en paz y debemos estar felices por él. Hoy celebraremos por ti querido tío, amigo, confidente, consejero y referente. Hoy estaré feliz por el curita más desordenado que conocí. Te mando un abrazo enorme al cielo, sé que ya estás compartiendo con tus seres queridos".
Margarita Flores, feligresa con más de veinte años en la parroquia Inmaculada Concepción de Vitacura agregó que: "Me gustaban mucho sus prédicas, él era un siete, tenía un carisma distinto, muy alegre, que llamaba a poner atención en sus mensajes y le tocaba a una el corazón".